sábado, 23 de enero de 2010

IN MEMORIAM ELIA TEJERINA STTL


Solo en la agonía de despedirnos somos capaces de comprender la profundidad de nuestro amor (George Eliot)


Es cierto que dada mi efímera relación en cuanto a trato aunque larga en cuanto a tiempo, no soy la persona más destacada para dedicarle unas palabras a su memoria, pues un sin fin de familiares, amigos, compañeros, incluso alumnos podrían hablar más y con más conocimiento. Pero en este caso he de matizar lo dicho pues no es preciso ser catedrático en lo que sea para escribir sobre algo o alguien, y más cuando se trata de sentimientos. Tras la noticia de su muerte me vinieron a la cabeza un montón de recuerdos sobre esta maravillosa persona, todos ellos circunscritos al ámbito escolar pues fue allí donde verdaderamente traté con ella. Es más esta coyuntura hizo en un comienzo que nuestra relación fuera la de profesor-alumno, pero ya por aquellos años en que su cara nos sonaba a mapa de ríos, unidades de relieve, provincias, y un largo etcétera, percibía humanidad en esta grandiosa dama.
Fueron dos años de coincidencia más otra serie de cuantiosos tratos por los frecuentados pasillos y aulas del IES Poeta Julián Andúgar, donde esta respetable profesora pasó algunos de los años de su vida. Era de aquellas personas de aparente semblante serio pero con corazón cuya ternura parecía extraída de un cuento de Hadas (¡Sí! Hadas con mayúscula), de hecho su voz suave y su acento propio de tierras palentinas no hacían pasar desapercibido a nadie.
No hace mucho "Don Blas" me contó una anécdota respecto a su jerga y entonación Palentina, resulta que se encontraba este profesor dando clases a un curso de "ESO" cuando Elia entró en el aula solicitando un mapa, al salir de la misma un alumno preguntó por "esa señora", a lo que se le indicó que era profesora y su nombre era Elia Tejerina. Acto seguido otro alumno demandó el por qué de dicho acento tan peculiar y poco sonado para el niño, a lo que se le contestó con que hablaba así porque era de Palencia; aprovechando que había salido el nombre de la provincia de nuestra queridísima Elia, lanzó al vuelo una cuestión sobre la localización de dicho lugar...hubo un silencio rotundo en el aula, nadie se atrevió a levantar la mano por miedo a piciarla, amén tampoco tenían mucha idea sobre donde estaba, hasta que el joven más tímido de toda la clase levantó la mano acompañando el gesto con un liso, suave y agradable: "¡En Soria-Hezegovina!".
Seguramente tuvo que soportar muchísimas triquiñuelas como las que había protagonizado su entrada al aula de Blas solicitando material para lo que tanto amó: dar clase. Sin ir más lejos el último año de curso en el cual nos impartía la asignatura de Geografía tuvimos un movido lapso a causa de dos o tres energúmenos entre los que destacaba un servidor, por ejemplo recuerdo cuando "el peri" se escondía bajo una mesa en clase detrás de la puerta y con las luces apagadas, para cuando ésta entrara asustarla con sus ensordecedores gritos acompañados de un cariñoso pellizco en el Talón de Aquiles, las continuas imitaciones por un servidor incluso un día oficial de actividades y entre un público que abarrotaba el salón de actos de nuestro centro, o cuando durante un examen de geografía de ríos, escondimos un mapa gigante enroscado en la persiana y pegado con chinchetas, y a mitad del ejercicio -argumentando que nos molestaba el sol- nos levantamos para bajar la persiana y así tener a la vista nuetra "ingeniosa y sutil chuleta", y el mapa gigantesco descendió como una pluma hasta el suelo, produciendo las carcajadas de los alumnos y las de la propia profesora.
Podría seguir contando trastadas que nos aguantó, pero he de destacar por encima de todo lo que nos enseñó. Fue una profesora preocupada por sus alumnos, a los que acompañó en innumerables viajes. Siempre apretaba los tornillos a cualquiera para sacar su máximo rendimiento, pero ante todo nunca, nunca, nunca te daba la espalda, constantemente tenía su oreja preparada para escucharnos y facilitarnos nuestro costoso avance personal en la medida de lo posible.
Tras mis años de carrera le perdí la pista hasta el día en que la vi subir las escaleras del Aulario Ginés de los Rios previo examen de las oposiciones. Me saludó y me cogió el hombro deseándome suerte. Más adelante también se interesó por mi tribunal, e incluso cuando concluí mi examen oral se acercó para preguntar por mis resultados, para interesarse por su alumno.
Pocas veces la vi después, alguna mañana en las que recogía a la gente de la rueda en Murcia y la veía cargada de energía y dirigiéndome su sonrisa mientras se encaminaba hacia la que fue su última casa profesional.
Insisto que no es preciso conocer toda la vida de una persona para saber cual ha sido su obra en vida, cuando los resultados de tan ardua labor que un día se encomendo esta gran "seño" los vive uno en primera persona. A ella entre otras personas le debo dedicarme al trabajo más bonito del mundo: La educación.
Marco Fabio Quintiliano autor romano del siglo I d.C. , insigne educador de la desvariada juventud, gloria, Quintiliano, de la elocuencia romana nos dió pistas ya en su día de lo que hoy sería un buen educador.
  • Nos decía que no estaba mal decir al alumno lo que está bien hecho y si es preciso alabarlo (no en exceso):
    En alabar las intenciones de los alumnos no sea avaro ni pródigo, porque un cosa –la envidia– engendra desgana en el trabajo, la otra –la loa excesiva– autocomplacencia.
  • También nos decía que era preciso el descanso en los alumnos:
    Con todo, hay que dar a todos los alumnos algún tiempo de expansión (…) No hay actividad alguna que pueda tolerar un trabajo continuo (…) y los alumnos aportan tanto más energías para aprender, una vez recuperados y frescos.
  • Otra de las cosas que planteaba era la variación de las actividades:
    Ya lo dijo Cicerón que si el método de enseñanza no es agradable al discípulo, pronto se quedará sin auditorio (…) Pásale al maestro de elocuencia lo que al pescador, que, como no ponga en el anzuelo el cebo más atractivo para los peces, se aburrirá a la orilla del agua sin lograr lo que desea.
  • Consideraba que los juegos eran un buen medio para la edcucación:
    Ni tendré de llevar a mal el juego en los niños (…) Hay hasta algunos juegos no desaprovechables para agudizar los espirítus de los jóvenes, cuando ellos apuestan entre sí con pequeñas preguntas sobre cualquier materia.
  • Creía preciso evitar que el niño acabara odiando el estudio:
    Será necesario procurar, que el niño, que todavía no es capaz de amar
    la actividad mental, venga a odiarla, y que más allá de los años de juventud conserve
    también el temor de una amarga experiencia en aquel tiempo sufrida.
  • Criticaba como método de disciplina el castigo físico:
    Pero que se azote a los alumnos mientras están aprendiendo (...) de ninguna manera lo quisiera, primeramente porque es cosa fea y propia de esclavos, y ciertamente un acto de injusticia, lo que por sí mismo se entiende, si cambias esa edad por otra. En segundo lugar, porque si hay alguien de tal vil carácter, que no se corrija por medio de la reprensión, también se hará duro contra los golpes, como los más degenerados esclavos.

Parece que Quintiliano dos mil años antes ya veía venir aspectos que hoy preocupan a los educadores, pero parece más aún que este autor hubiese conocido en persona a nuestra queridísima Elia Tejerina, y en ella se hubiese basado para anticipar lo que sería un gran profesor: porque ella nos reconocía lo que estaba bien, nos daba nuestro tiempo para descansar (algunos pensaban que ese tiempo era indefinido y aún siguen descansando de los deberes), en numerosas ocasiones nos hacía juegos siempre con un sentido educativo y nos mantenía en vilo para hacernos pensar, siempre ponía el cebo indicado para hacernos caer y engancharnos, y por supuesto jamás nos faltó al respeto ni nos menospreció.



No hay muerte sin olvido, por ello nunca te olvidaremos.
A tu memoria,
a los grandes momentos con que nos brindaste,
a la fuerza y empeño que pusiste para que todos saliéramos adelante y fuéramos felices,
al saber que nos enseñaste para así un día poder agradecértelo.
Por todo ello te dedico estas palabras para que jamás decaiga tu imagen y tu ser en nuestra memorian...Sit Tibi Terra Levis Elia Tejerina.

miércoles, 6 de enero de 2010

PERSEO: PERMISO DE RESIDENCIA EN EL PISO DE ARRIBA



SE REUNIERON EN ASAMBLEA TODOS LOS INTEGRANTES DE LA COMUNA PARA DECIDIR QUE HACER CON EL NUEVO INQUILINO:
El Caballero del Zodiaco con su vespa, el Señor Pink Mafioso, el Pequeño Escudero, el Pulpo Masajista, Caracol "Ojomoving", el Tractorista de Madera, el Soldadito de Plomo "de madera", Jengibre "La galleta de Shrek" y el Pajaro Pica-fludeten...
La decisión fue complicada y debatida: y no me extraña pues yo si veo aparecer a un tio semi-desnudo que lleva un casco estilo Atérix y alas en los tobillos, con una alabarda en la mano derecha y alzando una cabeza cortada chorreosa de sangre, cuyo pelo son serpientes, y amén de esto no tengo las nociones básicas de mitología griega...TAMBIÉN ME HUBIESE CUESTIONADO SU ADMISIÓN.

MICROHISTORIAS DE LA CHATARRA: Sentado en el Tiempo


Tic, Tac, Tic, Tac, Tic, Tac, Tic, Tac, Tic, Tac....TAAAAMMM; Suenan las dos de la tarde el cielo estaba encapotado no había dejado de manar lágrimas, daba la sensación de que estaba triste, de que algo iba a suceder, un aire extraño respiraban los escasos vecinos de la -por entonces- barriada de Santomera aquel 28 de septiembre de 1947. Mientras F.Z. se apresuraba a poner el tablacho obligatorio aquellos días en que caía con fuerza si no querías achicar los departamentos de la casa, veía como las hojas del Jazmin flotaban por el ya anegado patio, hasta el punto de impedir la visualización del resquebrajado hormigón. Él no estaba en casa, se había marchado a poner a salvo las dos yeguas que tanto habían dado de comer a la familia, no podía sentirse más sola y más asustada. No tardó en acceder el agua al comedor, y de ahí pasar al salón, en unos minutos la casa estaba completamente repleta de líquido turbio y la escapatoria se hacía más complicada. Los trastos comenzaban a flotar sillas, lámparas, marcos de fotografías y un largo etc. de artilugios que decoraban la casa o servían de utilidad cotidiana, semblaban barcas en un pantano doméstico en alza. F.Z. podía ver a los vecinos por los huecos de las ventanas, su casa no tenía planta alta, aunque sí una terraza que habían cerrado por peligro a que el suelo de ésta se desplomara algún dia debido al mal estado del mismo. Pronto al igual que el agua entraba por el patio empezaba a salir por las ventanas pero la entrada era mucho mayor que la salida por consiguiente no quedaba mucho tiempo para escapar sino quería perecer ahogada, y seguía estando sola. En la parte alta de una de las paredes de la casa había un orificio que antiguamente servía de entrada al palomar y que con el tiempo se había ido engrandeciendo, F.Z. subió a la escalera huyendo del agua que ya era imposible achicar, pero ni siquiera podía refugiarse de la anegación en la terraza porque la puerta estaba cerrada con maderos, el nivel ascendía cada vez más escalón a escalón. Cuando estaba apunto el agua de alcanzar el descansillo previo a la puerta de salida a la terraza, vió como algunos de los objetos flotantes salían por el orificio del antiguo palomar. El nivel hacía que sus pies se sintieran húmedos y percibiera que se estaba mojando las zapatillas de estar por casa...
Cuando la ramblá cesó encontraron el cuerpo sin vida de F.Z. en la parte alta de la escalera, él no podía sentirse más apenado al pensar que por salvar el medio de alimento de la familia había dejado a la mano de la naturaleza a la persona que le había acompañado durante casi toda su vida...


El 28 de septiembre de 1947 se produjo en la vega baja del segura una riada o mejor dicho ramblá bastante aguda. Este tipo de fenómenos son comunes en las zonas en las que nos encontramos, el sureste español, terrenos poco regados actualemente donde llueve de forma muy escasa aunque sí se dan grandes lluvias torrenciales. La escasa preparación que posee esta zona, pero sobre todo este tipo de fenómenos meteorológicos generan los desastres que se han ido dando sucesivamente en la historia. La gota fría o como se conoce científicamente por los metereólogos DANA (Depresión Aislada de Niveles Altos) se produce en zonas templadas de aguas relativamente cálidas, es muy usual en el Mediterráneo Occidental durante las fechas estacionales ya citadas (otoño), y es más común y violento en zonas donde las aguas suelen estar a una temperatura más elevada ya que esto permite la evaporación de la misma y la conversión en una zona de baja presión.
Este tipo de fenómenos ha dado lugar a muchas lluvias torrenciales con sus consiguientes consecuencias devastadoras, que hoy podemos ver en determinados puntos de información como la web de la Confederación Hidrográfica del Segura, en ella se recoge la siguiente información:

  • 1906: 25 de Septiembre. Rambla Salada: En el pueblo de Santomera el nivel del agua era de dos metros. La riada ocasionó 24 víctimas.
  • 1926: 5 de Septiembre. Ríos Guadalentín y Segura; 13 de Noviembre (Riada de Santa Victoria).
  • 1931: 25 de Diciembre. Ríos Segura y Guadalentín. Rambla Salada (Santomera).
  • 1939: 20 de Octubre. Ríos Segura, Pliego y Mula. Ramblas Salada (Santomera) y Benipila.
  • 1947: 28 de Septiembre (Avenida de Santomera). Río Segura y Ramblas de las Vegas Media y baja del Segura. Rambla Salada.
    Se produjeron unas espectaculares crecidas en las ramblas de la Vega Media y Baja, debido a una lluvia torrencial, que ocasionaron inundaciones en la huerta, desde Monteagudo hasta Guardamar, al unirse las aguas de las ramblas con la crecida que llevaba el río Segura. Quedaron inundadas zonas de Alguazas, Molina y Fortuna. El desbordamiento en la rambla de Churra ocasionó un muerto y la destrucción de varias casas. En Santomera la inundación resultó catastrófica ya que arrasó más de 100 casas y ocasionó 11 víctimas al desbordarse la rambla Salada, quedando sin hogar más de dos mil personas. En el área de Orihuela, la rambla de Abanilla dejó inundadas zonas de huerta y anegó el pueblo de Benferri, cuyo cementerio quedó asolado por el ímpetu de las aguas. La ciudad de Orihuela y su huerta quedaron inundadas por el desbordamiento del Segura. La catedral de dicha ciudad, llegó a tener cerca de un metro de agua en su interior. Otras localidades de la Vega Baja también quedaron inundadas, casos de Catral, Dolores, Almoradí, y Rojales.
  • 1949-: 23 de Marzo. Ramblas Salada (Santomera), Abanilla y Alquerías.
    (...)

Actualmente en el (ya) Pueblo de Santomera en una plaza que se denomina "Plaza de la Coronación" hay un monumento homenaje a las víctimas de la Ramblá sucedida en 1947. La obra en sí es insignificante pues se trata de una formación (que puede que simule un tablacho o presa)de hormigon con una serie de elemntos rectagulares (cuya posible interpretación sean los destrozos y escombros que causó el desastre) en la parte de atrás y frente a ello once cuerpos esféricos que simbolizan y homenajean a las víctimas del suceso, tres bolas son de menor tamaño representando los tres menores que fallecieron. Aunque artísticamente no sea significativo, sin lugar a duda el monumento y bajo mi punto de vista lleva una carga emocional grandiosa.

Amén de esto quise ir más allá en la documentación y le pregunté al tio Paco (nacido en 1933 y que tenía unos 14 años cuando ocurrió el suceso) dónde se encontraba aquel día tenebroso. Él estaba en nuestra casa aunque fue a llevar las yeguas a casa del Tio Manuel (aspecto que me ha inspirado para reconstruir la historia), me contó también que la única persona que permaneció en mi casa fue mi Abuelo (ya difunto) y que permaneció allí para salvar algunas de las pertenencias (animales, arreos, etc.) que había el hogar. También me dijo que unas calles más arriba hubo quienes sí perecieron debido al derrumbamiento de un techo, entre aquellas personas se encontraba la hermana del Antonio ("El Mandurrias") que por aquel entonces era una joven inocente niña, y que representa una de las esferas pequeñas del ya citado monumento. Además de todo esto me contó algunos de los detalles cronológicos y de otro tipo de la riada, en cuanto tiempo se inundó el pueblo, (aproximadamente unas tres o cuatro horas), la lluvia incesante que se había dado durante toda la mañana y que había parado en el momento en que llegó del todo la crecida, las zonas que se habían quedado sin inundar que permitieron que la gente salvaguardara pertenencias, animales, etc. y cómo estaba estructurada Santomera (con calles sinuosas e irregulares, casas entrecruzadas...) que influyeron en el desarrollo de lo acaecido haciendo en ocasiones de presas y puntos de estancamiento del agua, amén de otras cuestiones de menor interés. Todos estos detalles han contribuído a la efímera pero no por ello menos aproximada recreación literaria con que arranca el post.

Ahora os podréis preguntar dónde está la microhistoria y la chatarra. Desde que era muy "pequeñito" y mi mente me permite recordar, siempre ha habido una "sillita" en casa donde al sentarnos en el sofa apoyábamos los pies. Esta sillita contenía las iniciales F.Z. y un buen día cuando comenzé a tener uso de razón pregunté a mi madre qué miembro de la familia respondía a esas letras tan inusuales en nuestro entorno. Imaginaos la respuesta que me dio...en efecto! a nadie de la familia, esta silla había llegado al patio de mi casa tras la Ramblá y como los candeles son los más chatarreros del mundo mundial, la adoptaron y ahí permaneció el resto de sus días hasta hoy día 6 de Enero de 2010.
Sesenta y siete años lleva sirviendo esta silla a mi familia (sin contar el tiempo que la empleó su antiguo dueñ@) y seguro que lo hará otros tantos lustros hasta que nuestros hijos y nietos continúen en ella....SENTADOS EN EL TIEMPO...

La historia inicial es una recreación literaria pero que podría haber sido real. lLas iniciales de la silla seguramente no pertenecerían a ninguna de las once personas fallecidas en el desastre, aunque esto dota de mayor dramatismo la historia y me he permitido el lujo de adoptarlas como protagonistas de la historia (con el absoluto respeto a las víctimas). La ambientación de la historia es fidedigna, los acontecimientos ocurrieron como tal, y seguramente con un mayor esfuerzo de documentación oral se lograrían hacer muchísimas más cosas, pero no hemos de olvidar que esto es una microhistoria de la chatarra. Lo que verdaderamente importa es que a través de un objeto tan sencillo y tan desechable como es una "sillita", podemos acercarnos a nuestro pasado con ciertas dosis de literatura y dramatización, y cómo esos CACHARROS llegan a cobrar vida y a formar parte de nuestro pretérito, cada momento en que cojo un libro, una revista, o lo que sea, me siento a las faldas de la lumbre y subo los pies a la historia.